martes, 27 de octubre de 2015

La acción de las piernas en crol



La acción de piernas en crol

 

 

 

 


La acción propulsiva más importante en el estilo de crol es la que desarrollan los brazos, sin embargo,
el consumo de energía del batido de piernas es mayor que el de los movimientos de brazos y que el
del total de los movimientos, por ello se debe  preparar y entrenar  para que realicen correctamente su
papel estabilizador y neutralizador.

La acción de las piernas consiste en alternar diagonalmente el barrido de las mismas. Aunque las
piernas en alguna medida se mueven lateralmente durante su trayectoria, la dirección principal en que
lo hacen es de arriba abajo. Este movimiento está provocado por la acción de la rotación longitudinal
de las caderas.

El batido parte de las caderas y las rodillas marcan la guía en cada dirección, causando una acción de
latigazo de las piernas y los pies. En la fase ascendente del batido, la pierna se dirige a la superficie
extendida, con los pies en extensión plantar. Una vez la planta del pie alcanza la superficie, la rodilla se
flexiona y comienza la fase descendente del batido, con una extensión enérgica de las piernas hacia
abajo manteniendo los pies en extensión plantar. Sin embargo el movimiento de piernas no solo es
ascendente y descendente sino que además se desplazan en diagonal

La acción de las piernas no deberá ser ni muy superficial ni muy profunda. En cualquiera de los dos
casos la resistencia del agua ofrecerá más resistencia a nuestro avance.


ACCIÓN DE PIERNAS


1. Los pies están en su máxima separación. La pierna izquierda se halla al fondo y la derecha en la posición superior.


2. La pierna izquierda, sin doblarse la rodilla, inicia su subida. Los nadadores deben recordar constantemente el batir hacia arriba con la pierna estirada, porque si la pierna se doblara por la rodilla al batir hacia arriba, crearía una fuerza negativa que tiraría del nadador hacia atrás. La pierna derecha inicia el batido hacia abajo, bajando la parte superior de la pierna y simultáneamente doblándola por la rodilla.


3. La pierna izquierda continúa su camino hacia arriba, todavía sin flexión de la rodilla. La pierna derecha empieza a descender vigorosamente al ser forzada hacia abajo su parte superior. La rodilla empieza a extenderse y, a medida que el pie derecho pasa por el lado de la pierna izquierda, el empeine está en línea paralela con el tobillo del pie derecho.


4. La pierna izquierda, aproximándose a la cima de su batido, empieza a flexionar ligeramente, mientras que la pierna derecha está a punto de terminar el batido hacia bajo. La rodilla derecha se halla, de hecho, en el punto más profundo de su recorrido y desde él iniciará la subida, aún cuando el pie derecho continuará descendiendo.


5. La parte superior de la pierna izquierda inicia su descenso y el pie izquierdo continúa hacia arriba. La pierna derecha se halla al fondo del batido con la rodilla totalmente extendida.


6. La pierna izquierda, con su rodilla al máximo de doblamiento, se halla a punto de iniciar su batido hacia abajo. La pierna derecha estirada por la rodilla inicia su batido hacia arriba.


7. La pierna izquierda se halla ahora en la fase propulsiva de su batido. La pierna derecha continúa su recuperación bien estirada.


8. La fase propulsiva de la pierna izquierda está casi enteramente completada. La pierna derecha muestra una ligera flexión de la rodilla.


9. La pierna izquierda completa casi su extensión mientras que la flexión de la rodilla derecha aumenta.


10. Los pies se hallan nuevamente a su máxima separación y el ciclo de batido va a iniciarse de nuevo.